BRUSELAS.- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, ha advertido al primer ministro británico, David Cameron, de que el Tratado de la Unión "es muy claro en que la única moneda de la Unión es el euro" y ha dejado claro que el Banco Central Europeo mantiene dos objetivos en el futuro que pasan por preservar "la moneda única" y "el mercado único".
"No me compete comentar una carta dirigida al presidente del
Consejo Europeo. Esto es una cuestión política", ha dicho el banquero
central europeo durante una comparecencia ante la Comisión de Asuntos
Económicos y Monetarios de la Eurocámara, preguntado por las
reivindicaciones del 'premier' para hacer campaña para que Reino Unido
se quede en la UE, cuestión que someterá a referéndum antes de que acabe
el 2017.
Eso sí, ha dejado claro a Cameron que "el Tratado es muy claro" y
"dice que la moneda única de la Unión es el euro".
"Nuestro mandato es
definir y aplicar la política monetaria única para esta moneda a fin de
mantener la estabilidad de precios. Y creo que esto es la base de
nuestro trabajo y es nuestro deber cumplir nuestro mandato", ha zanjado.
"Lo que es importante para el BCE es que sigamos cumpliendo nuestro
mandato dentro de las provisiones del Tratado", ha recalcado.
Respecto a la renegociación de las relaciones con la UE que pide
Cameron, Draghi ha admitido que el "proceso" va a ser "muy complicado"
en los próximos meses y ha reclamado a "ambas partes" que actúen de
"buena fe" pese a anticipar una "interacción complicada".
"Nosotros queremos obtener dos objetivos en el futuro. Uno es la
moneda única y el segundo es el mercado único", ha zanjado. "Tenemos que
preservar estos dos logros extraordinarios de la Unión Europea", ha
remachado.
Cameron ha reclamado a sus socios un acuerdo "claro, irreversible y
legalmente vinculante" con el que poner fin a la "obligación" de
trabajar por una "Unión más cercana", integrada, pero también cambios en
las relaciones con el bloque comunitario para impedir la
"discriminación de países al margen del euro" y para "proteger la
integridad de un mercado único".