DUBLÍN.- Irlanda abandonó este domingo el rescate tras tres años de enormes sacrificios,
pero lo hace recuperando el "orgullo" que perdió cuando solicitó un
programa de ayuda a la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario
Internacional (FMI) por 85.000 millones de euros.
En un mensaje a
la nación televisado por la cadena pública RTE, el primer ministro
irlandés, el conservador Enda Kenny, destacó hoy que la "paciencia y resistencia" de los irlandeses "han restaurado nuestro orgullo nacional" y envía al mundo un "poderoso mensaje: Irlanda está luchando".
"Este
es un paso importante, pero no un fin en sí mismo. Nuestras vidas no
cambiarán de la noche a la mañana", declaró Kenny al marcar la
conclusión del programa de ayuda Irlanda, el primer país rescatado de la zona euro que lo abandona con éxito (los otros son Grecia, Portugal y Chipre).
El
"Taoiseach" (primer ministro) reconoció que la crisis está teniendo
"efectos devastadores" en un muchas familias, pero aseguró que el
"espíritu de nuestra gente es más fuerte que nunca", lo que resultará
clave para "hacer frente a los retos que quedan".
La economía, dijo, va en el "camino adecuado" y comienza a "recuperarse",
si bien el Ejecutivo de coalición entre conservadores y laboristas
mantendrán, ahora por sí mismo, el rumbo de los ajustes y las medidas de
austeridad.
"Creedme, el Gobierno trabajará con vosotros
para poner las bases de un futuro próspero para vosotros y la siguiente
generación", señaló Kenny, quien prometió una economía construida sobre
"la empresa, no la especulación".
Después de doce revisiones
trimestrales positivas, la troika de inspectores de la Comisión Europea
(CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el FMI dio luz verde el pasado
octubre a la conclusión del rescate irlandés, tras confirmar que Dublín
puede regresar a los mercados de deuda para obtener financiación
alternativa a los fondos de ayuda internacional.
"Hemos restaurado
nuestra reputación y credibilidad internacionalmente. Mañana Irlanda
volverá a ser un miembro normal de la zona euro, con las mismas reglas,
obligaciones, apoyos y oportunidades que todos los otros miembros. Desde
mañana, accederemos a los mercados financieros igual que otros países", reiteró Kenny.
En un intento por ofrecer una imagen de fortaleza, el Gobierno ha decidido también abandonar el programa sin solicitar una "línea de crédito preventiva",
que hubiese sido concedida con ciertas condiciones para hacer frente a
imprevistos, ya que tiene cubiertas sus necesidades presupuestarias
hasta comienzos de 2015.
Por ese motivo, el "Taoiseach" quiso
celebrar hoy con solemnidad la recuperación de la soberanía económica
que perdió el país al ponerse hace tres años bajo la tutela de la troika
en una intervención televisada, la tercera que hace de este tipo desde
2011.
"Nos aseguraremos de que nunca más se pone en riesgo la
estabilidad de Irlanda por la especulación y la avaricia", subrayó Kenny
en referencia a los desmanes del pasado, sobre todo los de la banca.
El
colapso del sistema financiero tras el estallido de la burbuja
inmobiliaria en 2008 obligó al Gobierno centrista de entonces a rescatar
a la banca nacional y a asumir una deuda que, a su vez, secó las arcas
del Estado y puso al país bajo el programa de ayuda de la UE y el FMI.
En este sentido, Kenny volvió a insistir en que, a pesar de que los datos macroeconómicos son alentadores, el Ejecutivo mantendrá el rumbo de las reformas emprendidas en 2010, lo que augura más austeridad.
Prueba
de ello es que los presupuestos generales de 2014 contemplan subidas de
los impuestos y recortes del gasto público valorados en 2.500 millones
de euros.
Dublín considera que esas cuentas permitirán reducir su
déficit público hasta el 4,8 por ciento del Producto Interior Bruto
(PIB) en 2014, hasta llegar al objetivo del 3 por ciento marcado en el
rescate para el año siguiente.
También prevé que la tasa de paro,
que actualmente es del 12,6 por ciento -la más baja desde 2009-
continuará cayendo y que, aunque el crecimiento en 2013 será modesto, en
2014 podría situarse en el 1,75 por ciento.
"Durante nuestra
historia, el pueblo irlandés siempre ha demostrado que nada es imposible
de lograr para nosotros cuando realmente nos centramos en un reto o una causa", agregó Kenny.