WASHINGTON.- Legisladores republicanos y demócratas revelaron el martes planes
marcadamente diferentes para recortar el déficit a largo plazo, un hecho
que deja de manifiesto la amplia brecha que separa a los partidos y la
dificultad de alcanzar un compromiso en breve.
La propuesta republicana pretende alcanzar un equilibrio en 10
años a través de recortes por 4,6 billones de dólares en programas
locales y sin ningún incremento impositivo más allá de los aprobados el 1
de enero de este año.
Los demócratas apuntan en su propuesta a reducir los déficit
federales en 1,85 billones de dólares en 10 años, imponer alzas
impositivas sobre los ricos y añadir 100.000 millones de dólares en
gastos de infraestructura para impulsar el crecimiento laboral.
Ninguno de los dos planes tiene posibilidad de convertirse en
ley, ya que los demócratas se oponen a recortes en programas sociales y
los republicanos a los aumentos impositivos.
"Esto muestra que la brecha que tenemos que cerrar es más grande
que nunca", dijo Chris Van Hollen, el principal demócrata en la Comisión
de Presupuesto de la Cámara de Representantes.
El republicano Paul Ryan de Wisconsin presentó la última parte de
su propuesta "Camino a la Prosperidad", que probablemente sea aprobada
este mes por la Cámara de Representantes, controlada por los
republicanos.
Esta versión equilibrará el presupuesto para el 2023 comparado con la meta del 2040 en el plan anterior.
La tarea será más fácil debido a los 620.000 millones de dólares
en aumento de impuestos aprobados en enero sobre los ricos y la
revocación de las reformas a la salud aprobadas por el presidente Barack
Obama -algo que es poco probable que ocurra- que ahorraría otros 1,8
billones de dólares.
En una rueda de prensa, Ryan defendió mantener el aumento de
impuestos de enero diciendo que su daño será corregido por una reforma
impositiva que recortará drásticamente las tasas.
Los recortes propuestos por Ryan a programas sociales como
Medicaid, que brinda servicios de salud a pobres y algunas personas con
discapacidad, hacen inaceptable el plan para los demócratas, que
controlan el Senado.
La respuesta de los demócratas a la propuesta de Ryan fue cortante.
El líder de la mayoría en el Senado Harry Reid dijo que el plan
otorgaría nuevas exenciones impositivas a los ricos y elevaría los
impuestos a la clase media, además de recortar servicios esenciales del
gobierno como inspecciones alimentarias y agencias del orden, y
debilitar a Medicare.
En los últimos cuatro años, el déficit de presupuesto de Estados
Unidos ha superado 1 billón de dólares anuales, contribuyendo a una
creciente deuda nacional que actualmente es de casi 16,7 billones de
dólares.
El plan de los representantes republicanos prevé una caída del
déficit a 528.000 millones de dólares el próximo año, 125.000 millones
de dólares en el 2015 y 69.000 millones de dólares en el 2016.
La propuesta de Ryan se da en momentos en que demócratas y
republicanos han estado considerando la posibilidad de alcanzar un
compromiso de presupuesto a largo plazo tras más de dos años de agrias
disputas.
La semana pasada, Obama se reunió en privado con legisladores
republicanos para tantear su disposición para llegar a un acuerdo. Esta
semana, el presidente mantendrá cuatro reuniones con miembros del
Congreso para explorar las posibilidades.