WASHINGTON.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha
subrayado la necesidad de que el Gobierno de Estados Unidos adopte un
"ritmo mesurado" de reducción del déficit que evitar que estas medidas
"socaven la recuperación" en el país, según recoge el informe sobre la
economía estadounidense correspondiente al Artículo IV del organismo.
En particular, los directores ejecutivos del FMI advirtieron
que es "crítico" tanto despejar la incertidumbre creada por el
"precipicio fiscal" en 2013 como elevar sin demora el tope de la deuda.
Además, reclamaron que se llegue a un acuerdo "lo antes posible" sobre
un plan integral de consolidación fiscal a medio plazo, basado en un
aumento de la recaudación y en un recorte del gasto en prestaciones.
Asimismo, destacaron los riesgos a la baja que existen para
las perspectivas de Estados Unidos, como consecuencia de las
incertidumbres en el plano externo e interno. Por ello, instaron a las
autoridades estadounidenses a aprovechar de manera eficaz el limitado
espacio del que dispone la política económica para respaldar la
recuperación a corto plazo y restablecer la sostenibilidad fiscal a
medio plazo.
Por otro lado, el FMI también defendió que la política
monetaria tendrá que seguir siendo "sumamente acomodaticia durante
bastante tiempo" en el país, y considera que existe margen para aplicar
una política "aún más laxa en caso de que las perspectivas se
deterioren", pese a que varios directores creen que su eficacia podría
resultar limitada por los bajos niveles de las tasas de interés.
Respecto a la política de vivienda, elogiaron las medidas y
propuestas recientes del Gobierno e instaron a que se pongan en práctica
de manera oportuna y decisiva, mientras que sobre el mercado laboral
advirtieron de que la persistencia de un elevado nivel de desempleo a
largo plazo crea el riesgo de pérdidas de capital humano y reduce la
vinculación con la fuerza laboral.
Por último, los directores hicieron hincapié en la importancia
de un enfoque multilateral para la gestión de la política económica en
Estados Unidos, y felicitaron al país por su participación activa en la
promoción de la coordinación internacional con respecto a las reformas
de la regulación financiera.