viernes, 15 de febrero de 2008

Anatomía de una crisis / Josep Borrell

Dos días de reuniones y debates en el Banco Mundial y en el FMI ayudan a entender cómo las hipotecas subprime americanas han provocado una crisis mundial que ha arrastrado a las bolsas y sumido a las economías desarrolladas en la incertidumbre.

Como manifestación evidente de esa crisis, los grandes bancos mundiales han tenido que reconocer sus pérdidas provocadas por el hundimiento del mercado inmobiliario en EEUU y la diseminación de créditos de alto riesgo concedidos a inversores poco solventes a través de productos financieros opacos.

Antes que una crisis bursátil, la actual es sobre todo una crisis de crédito y especialmente de la “titulización” del crédito. Los genios de las finanzas desreguladas argumentaban que convertir los créditos en títulos que cualquier inversor podía comprar aumentaría la solvencia del sistema al distribuir los riesgos entre muchos inversores en vez de estar concentrados en el balance de los bancos.

Pero, en la práctica, la “titulización” ha sido una grave causa de fragilidad que vamos descubriendo a medida que la crisis se extiende.

Primero, porque si los prestamistas podían desembarazarse rápidamente de los créditos que concedían no tenían porque ser demasiado exigentes con la solvencia de sus clientes.

Si no hay que preocuparse por la devolución del crédito que se concede, se da más fácilmente: el crédito hipotecario a deudores de poca solvencia concedido por establecimientos financieros no regulados se disparó: en el 2006 las hipotecas subprime representaban casi la mitad de todas las concedidas.

Segundo, porque los compradores de esos títulos no podían verdaderamente valorar los riesgos que asumían dada la sofisticación financiera con la que se generaban, produciendo, de paso, sabrosas comisiones a los emisores.

Tercero, por la contribución de las agencias de valoración al camuflaje del riesgo. Algunas han concedido la clasificación triple A, a títulos respaldados mayoritariamente por subprimes y créditos al consumo. Han sido jueces y parte asesorando a los bancos en su producción y a la vez calificando su riesgo.

Cuarto, porque no se tomó en cuenta el riesgo de liquidez, es decir, que una baja general de los precios inmobiliarios aumentara todos los riesgos simultáneamente y que los tenedores de esos títulos no encontrasen comprador.
Es lo que empezó a pasar después del verano y cuando las agencias empezaron a revisar sus notaciones a la baja no hicieron sino echar leña al fuego retrayendo las compras de activos “contaminados” al alertar sobre el nivel de riesgo que ayer minusvaloraban.

Quinto, porque en realidad los riesgos no estaban realmente diseminados en el conjunto del sistema sino concentrados en operaciones bancarias fuera de balance.

El total de las hipotecas subprime concedidas es del orden de 1,3 billones de dólares y las pérdidas potenciales estimadas en un máximo de 400.000 millones. Mucho dinero, sin duda, pero hay que compararlo con los 20 billones de dólares de obligaciones emitidas para financiar deuda privada en EEUU.

El problema es que una parte muy importante de esos activos estaban concentrados en agentes financieros ligados a bancos, pero fuera de su balance, para escapar a controles de supervisión y reglas prudenciales, los denominados structured investments vehicles (SIV), dotados de muy poco capital propio.
Cuando los títulos que emitían no encontraron comprador, los bancos-madre han tenido que reintegrar en sus balances los activos dudosos de sus SIV.

El tiro ha salido por la culata. Si la titulización debía reducir los riesgos financieros de los bancos, ahora éstos se encuentran entre dos fuegos. Por una parte, la dimensión de sus balances aumenta lo que les obliga a inmovilizar más capitales propios. Pero al mismo tiempo las pérdidas que sufren reducen sus capitales propios y menos capitales propios implica menos posibilidad de conceder créditos.

Esa situación, junto a una desconfianza generalizada, es lo que ha producido una reducción drástica del crédito concedido al conjunto del sistema económico y la consiguiente disminución de actividad. Ello afecta especialmente a las transacciones inmobiliarias y se refleja en su reducción.

La intensidad y la duración de este credit crunch dependerá de la magnitud de las pérdidas en las que han incurrido los bancos. Según algunas estimaciones, las subprimes habrían costado 130.000 millones de dólares a los 20 más grandes bancos en el 2007.
Pero lo cierto es que no se sabe cuántas pueden ser y cuándo se acabará de tomarlas todas en cuenta. El ejemplo de la Societe Generale es ilustrativo: poco antes del episodio rocambolesco del trader que invirtió 50.000 millones de euros por libre, su Pdg minusvaloraba el problema cifrándolo en 200 millones, pero ahora reconoce que son más de 2.000.

Mientras esa incertidumbre persiste, la desconfianza se extiende y los mercados se paran (¿y cómo valorar productos financieros complejos si no hay mercado?). Y la crisis afecta a nuevas víctimas, como las entidades de garantía de créditos, monolines en inglés.
Esas empresas se dedicaban inicialmente a garantizar las obligaciones emitidas por entidades locales, pero extendieron su negocio a la titulización de subprimes y la crisis ha afectado de lleno a Ambac, uno de los más importantes monolines, y a la calidad de los títulos que ha garantizado.

Ello contribuye a la reacción en cadena de desconfianza, ventas, caída de precios, degradación de los balances bancarios, restricción del crédito, temor a la recesión y caída de las bolsas. Éstos han sido los mecanismos de la crisis financiera.
Otra cosa es cómo se sale de ella. Las recetas para resolverla están cambiando y hasta el FMI de la bienvenida a la intervención publica para sostener la demanda a través de “impulsos” fiscales.

Pero éste es tema para otro día.

Portugal mira con mucho recelo los riesgos que pesan sobre la economía y el empleo en España

LISBOA.- Tras ocho años consecutivos de marcha a contracorriente, durante los cuales la economía nacional tuvo un crecimiento inferior a la media europea y el país tuvo que pagar un precio elevado para situar el déficit presupuestario al nivel del 3% exigido por Bruselas, Portugal empezaba a vislumbrar el futuro con un cierto optimismo, según www.estrelladigital.es
Pero ante la grave crisis financiera mundial provocada por el escándalo de las subprime y, sobre todo ante los riesgos que pesan ahora sobre la economía y el empleo en España, muchos expertos económicos lusos ya no son tan optimistas y, al contrario, que el gobierno socialista de José Sócrates, pronostican ya un nuevo frenazo del PIB y también un aumento del paro.
Los factores de mayor incertidumbre están relacionadas con la evolución de la economía española. Y la razón es muy sencilla: al contrario de lo que ocurría y ocurre aún en España, el motor del crecimiento del PIB luso - no pasó del 2% en 2007 y podría caer este año al 1,9% - no es el sector de la construcción, que lleva ya varios años en crisis, pero sí las exportaciones, cuyo dinamismo reposa mucho sobre el mercado español: la creciente integración de las dos economías, desde la entrada de los dos países en la Comunidad Europea (1986), hace que España sea hoy el primer cliente de Portugal: de Enero a Noviembre 2007, absorbió el 28,2% de las exportaciones lusas, contra el 20% en 2003 y solo el 15% hace diez años.

Lo que más preocupa los expertos portugueses es la quiebra del mercado inmobiliario español. De un lado, las dos terceras partes de las exportaciones lusas de las industrias de acero, cemento, madera, plásticos y vidrio tienen como destino el sector español de la construcción, cuya reconversión no dejará pues de afectar muy duramente los fabricantes portugueses.
Y no hay que olvidar, por otra parte, que unos 100.000 portugueses ganan la vida en España, principalmente en la construcción, y muchos de ellos sin contratos o sólo con “contratos basura”, con lo que el incremento del índice del paro español traerá también, inevitablemente, mas desempleo en Portugal.
Esa relación directa será más sensible en comunidades como Galicia y Andalucía, donde hay más mano de obra lusa y donde crece más el paro en la construcción.

Aún así, el Banco de Portugal no considera que la degradación de la situación económica y del empleo en España suponga un riesgo importante para la recuperación de la economía lusa: en su último informe, no habla para nada de España, que también es ya el primero inversor extranjero en Portugal, y solo menciona dos grandes peligros, que son la crisis financiera internacional y el riesgo creciente de recesión en Estados Unidos.
La oposición es muy critica con el Banco Portugal, cuyo gobernador es el ex-líder del Partido Socialista (PS) Vítor Constâncio, sospechoso de apoyar los análisis mas optimistas de Sócrates, pero la mayoría de los analistas están de acuerdo en un punto importante: la diversificación del comercio exterior luso hace que la situación del primer cliente del país tenga un impacto menor en la economía nacional.

Ocurre, en efecto, que las exportaciones de maquinas y herramientas, coches, materiales eléctricas, etc, destinadas mas a otros mercados que a España, son las que registran mayores crecimientos. Así, por ejemplo, en el primer semestre de 2007, las exportaciones de productos de alta tecnología (“High Tech”), ya representarán 506 millones de euros, frente a los 447 millones para las importaciones, es decir, con un saldo positivo, lo que no había ocurrido nunca antes.
“Portugal empieza a recoger los frutos de la gran apuesta en el I+D y el desarrollo tecnológico de su aparato de producción”, dicen los responsables lusos, que apuestan también en la busca de nuevos mercados, como la China y la India, y mas aun en África, principalmente Angola, que es ya el segundo cliente de Portugal, tras España, y por delante de Francia, Alemania, ...

Además, aún pensando que Portugal tiene hoy mejores armas que España para hacer frente a la crisis financiera mundial y al riego de recesión en Estados Unidos – principalmente porque la economía nacional evoluciona a contra-ciclo, depende muchísimo más del dinamismo de las exportaciones que de la construcción y sobretodo ya inició la fase de recuperación - la mayoría de los expertos lusos manifiestan una gran admiración por las “performances” de la economía española.
Es decir, con Portugal creciendo a un ritmo de 1,9% u 2%, no entienden las críticas que se hacen en España a la política económica del gobierno socialista que, al final de una legislatura muy positiva en términos de crecimiento y de empleo, crece aún a un ritmo del 3,8%, superior a la media europea.
“Con las cuentas publicas y la seguridad social muy saneadas", dicen los analistas lusos, "España tiene margen para bajar los impuestos, aumentar las ayudas a la familia y relanzar así el consumo interno, lo que sería muy positivo para consolidar esta fase de recuperación de la economía portuguesa”.

Esta crisis es nuestra / Luis de Velasco

A poco de iniciarse en Estados Unidos la crisis de las hipotecas basura y extenderse su contagio fuera, el Gobierno de nuestra nación se apresuró a manifestar que nuestra economía no se vería afectada porque sus fundamentos son sólidos.
Pocas semanas después están claras dos cosas. Una, que efectivamente nuestra economía está siendo, hasta ahora, escasamente afectada por factores externos. Dos y mucho más importante, que la situación económica se está deteriorando rápidamente (el propio ministro de Economía ha reconocido que mucho más de lo esperado) y que las causas son internas.
Esta crisis económica es, sobre todo, nuestra, en lo esencial no viene de fuera aunque, al ampliarse, nos afecta.

El modelo de crecimiento en el que “la ciudad alegre y confiada” se instaló desde hace quince años estaba basado en factores puramente internos y llevaba dentro las semillas de su propia destrucción.
Tipos de interés reales negativos o muy bajos, abundancia de mano de obra susceptible de explotación, alto volumen de acumulación de beneficios empresariales, bajísimo nivel y casi nulo crecimiento de la productividad, gran endeudamiento de familias y empresas, insólito protagonismo del sector de la construcción (en diez años duplica su participación en el PIB alcanzando un increíble 18 por ciento) y, dentro del mismo, de la edificación (un 75 por ciento del total), estaba claro que “se moriría de éxito”, que la cosa era pan para hoy (no para todos) y hambre para mañana (para muchos más).

Recientes y variados indicadores, desde el aumento del paro en enero hasta la gran caída de la edificación, pasando por el fuerte incremento de la desconfianza y el mal comportamiento de la producción industrial, muestran que vienen tiempos peores y mucho más difíciles de gestionar que unos años recientes en que muy poco se ha hecho para preparar eso que se denominó cambio de modelo de crecimiento, cambio que es absolutamente imprescindible pero difícil y siempre lento.

Los desgarros políticos y sociales que produce el desmadre del modelo autonómico, que se irán viendo más agudamente en los años próximos si no se rectifica seriamente, tienen también su coste económico.
La unidad del mercado interior, del espacio económico interior, está cada vez más quebrantada y ese proceso es simultáneo a lo que ya vaticinó uno de los responsables de este estado de cosas, Maragall, cuando habló refiriéndose al Estado de la nación como un “Estado residual”.
Los instrumentos de política económica y social que quedan en ese Estado central son cada vez más escasos, con lo que su capacidad de gestionar una crisis muy profunda como la que encaramos es limitada y siempre sujeta a negociaciones y componendas.
Eso abarca, por nombrar sólo cuatro apartados, desde temas fiscales (lo hemos visto en el llamado “sudoku” de la financiación autonómica y en los trapicheos de última hora para lograr la aprobación del presupuesto para este año) hasta políticas absolutamente claves como la educativa (algo tendrá que ver con esto el fracaso denunciado por el Informe Pisa), la de vivienda y urbanismo (el país de Europa Occidental con más viviendas construidas en los últimos años es también el país donde más inaccesible es la vivienda para más de la mitad de la población, algo falla aquí), la del agua con Autonomías “adjudicándose” cuencas de ríos o la de internacionalización (donde esos entes siguen despilfarrando y haciendo la guerra, una guerra absolutamente improductiva, por su cuenta).
El Estado central no puede dedicar parte creciente de sus energías a eternas discusiones con las insaciables partes autonómicas de ese Estado. Tampoco hay sociedad que lo resista. Siempre, aunque se quiera ignorar, hay unos costes.

Por supuesto que no todo los pasivos deben anotarse al sistema autonómico. La política económica de estos cuatro años, salvo alguna excepción, se ha limitado a no hacer nada, a acompañar unas brillantes cifras macroeconómicas.
Eso sí, acompañadas de unas menos brillantes en renglones como el déficit exterior y el correlativo endeudamiento o el ya citado estancamiento de la productividad o la persistente tendencia a la inflación, debilidades extremas todas ellas ocultas bajo los ladrillos.
Y también acompañadas de unas mucho menos brillantes en cuanto al reparto, crecientemente desigual, de ese aumento del bienestar, algo ya reconocido por (casi) todos.

La gestión de esta crisis que está ya ahí y que no es sólo económica exige acuerdos políticos amplios para rectificar muchas cosas. Unos segundos Pactos de la Moncloa no sólo económicos y entre partidos que respeten la Constitución.
Es más que probable que una clase política cada vez más alejada de la realidad y de los ciudadanos no esté a la altura de estas graves circunstancias.

Zapatero puede perder y ser presidente / Pablo Sebastián

La última encuesta del CIS sobre intención de voto en las elecciones del 9 de marzo ha confirmado el virtual empate entre el PSOE y el PP, con solo 1,5 puntos de diferencia a favor de los socialistas y una estimación, sobre reparto de escaños, que va de 1 a 10 diputados a favor de los socialistas, lo que abunda en el actual empate ofreciendo los encuestadores una horquilla de 158-163 para el PP y de 153-157 para el PSOE.
Pero con la novedad, nada desdeñable, de que el PP no cesa de recortar distancias con el PSOE y se beneficia de una tendencia ascendente que lo podría llevar a la victoria final. Y no sabemos si, de verdad, el PP no está por delante, porque no hay que olvidar que esta encuesta (realizada con una muestra de 18.000 entrevistas y terminada el pasado día 4 de febrero) ha sido elaborada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que depende del Gobierno.
Sin embargo tampoco habría que descartar que la encuesta hubiera sido maquillada por el propio Gobierno para escenificar un empate y movilizar al PSOE rebajando las propias expectativas del propio sondeo que según fuentes propias al Partido Socialista situarían a Zapatero cerca de los 170 escaños lo que le daría una victoria cómoda y segura. En todo caso la encuesta oficial publicada por el CIS habla de un empate y de un avance del Partido Popular.

Sin embargo, la posible victoria del PP sobre el PSOE no garantiza a Rajoy su investidura como presidente del Gobierno, porque para ello necesitaría, al menos, 165 escaños y aún está muy lejos. Al contrario, Zapatero puede perder las elecciones pero renovar la presidencia del gobierno con apoyo de los nacionalistas e IU. Y, también, cabría la gran coalición PSOE-PP, en el caso de un empate entre ambos, lo que tampoco conviene descartar.

El resultado de la encuesta es una pésima noticia para Zapatero que ya está bajo el síndrome de Hillary Clinton, con Rajoy (quien no es Obama) en los talones, pero avanzando sin cesar, ante el deterioro imparable de la política económica y de la imagen de Zapatero. De ahí, los nervios del presidente del Gobierno, y su reciente confesión de que necesita inyectar “alta tensión y dramatizar” en la campaña electoral, porque ya no descartan un vuelco durante los días que quedan (y los debates en la televisión), que los lleve a una clara derrota.

La encuesta —una similar da la clara victoria del PSOE en Andalucía, como era de esperar— además anuncia la participación del 72,2 por 100, lo que es un escenario muy favorable al PSOE, que, en cierta manera, empeora mas si cabe la situación de Zapatero, porque en caso de crecimiento del nivel de la abstención, las posibilidades del PP aumentarían de manera sensible.
Así mismo resultan llamativos los siguientes datos: la posibilidad de que Rosa Díez consiga un escaño por Madrid, los diez escaños de CiU, los 7 estables de PNV, la perdida de 2 escaños de ERC y la caída de Coalición Canaria que podría quedar reducida a un escaño, y la progresión de IU/ICV, con posibilidad de pasar de cinco a seis escaños.

Sobre los motivos que explican el empate entre el PSOE y el PP que ofrece la encuesta del CIS destacan los siguientes:

1. Gestión del gobierno y de la oposición: solo el 28 por cien de los encuestados consideran buena o muy buena la gestión del gobierno frente a un 26 que creen que ha sido mala. Por el contrario el 46,2 por 100 aprueba la gestión de la oposición, mientras que el 45 por 100 la suspende.

2. Políticas sectoriales: el gobierno aprueba en educación, sanidad, política exterior y europea, medio ambiente y empleo, y suspende en economía, terrorismo, seguridad, vivienda, emigración y estado de las autonomías.

Otro hecho relevante del sondeo electoral es que el 30 por 100 de votantes aún no ha decidido el sentido de su voto, lo que es un dato crucial, aunque también una clara mayoría de los encuestados cree que ganará el PSOE y que Zapatero será presidente.

A propósito de la investidura del futuro presidente del Gobierno hay que decir que podría darse el caso, nada improbable, de que el PP ganara las elecciones en votos y escaños pero que no pudiera gobernar por falta de los apoyos suficientes entre los partidos nacionalistas.

Partidos nacionalistas que suman (CiU 10, PNV 7, ERC 6, BNG 2, EA 1 y N-Bai 1) 27 escaños, lo que le daría a Zapatero la posibilidad de formar un nuevo gobierno en el caso de que solo llegara a los 158 escaños —la parte baja de la horquilla que le otorga el CIS— con bastante facilidad porque les faltarían 18 escaños y puede lograrlos, incluso, sin la necesidad de contar con CiU, porque esto último les obligaría a entregar a los convergentes el gobierno de la Generalitat.
Además Zapatero sumaría los 5 o 6 escaños de Izquierda Unida.

UGT ve a la economía “vulnerable” y CCOO denuncia que los alimentos siguen “disparados”

MADRID.- UGT afirma que el aumento de la inflación en enero vuelve a demostrar la "vulnerabilidad" de la economía española a los cambios en el entorno internacional, provocada por la "elevada" dependencia energética y un modelo productivo "poco competitivo". Por su parte, CCOO explicó que la tasa interanual más que duplica el objetivo del Banco Central Europeo para todo el año y denunció que el precio de los alimentos siguen "disparados".
UGT indicó que la subida continuada del petróleo y los cereales, que han afectado a toda la zona euro, son algunos de los componentes que explican que la inflación interanual se sitúe en el 4,3%, por lo que consideró que hay que tomar soluciones a corto y largo plazo.

A corto plazo, estableciendo medidas para asegurar la transparencia en la formación de precios, sobre todo, en el sector servicios y en la distribución y comercialización de los alimentos, y a largo plazo, propiciando el cambio hacia un modelo productivo más fuerte y basado en actividades de alto valor añadido, como la industria.

A la vista de este crecimiento, el sindicato, que califica la inflación como el impuesto "más regresivo e injusto" para los trabajadores, defiende el establecimiento de cláusulas de revisión salarial "de eficacia plena" en todos los convenios, para que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo.

Además, UGT destacó que a la incidencia puntual de algunos grupos de productos de marcado "componente estacional" en el mes de enero, se une el repunte "sostenido" de los precios de las materias primas y de los productos energéticos a nivel internacional. "Enero vuelve a reflejar la persistencia del shock externo que venimos padeciendo desde noviembre", subrayó.

En su opinión, las perturbaciones externas también están afectando "negativamente" a las economías de los países con los que España comparte moneda, dado que en la zona euro, el crecimiento de los precios en enero se estima en un 3,2%, una décima más que en diciembre.

"Una vez más se observa que nuestra estructura de precios es muy vulnerable a los cambios en el entorno internacional: la situación de elevada dependencia energética y un modelo productivo poco competitivo, acentúa las tensiones coyunturales de precios en nuestro país provocadas por factores externos", concluyó el sindicato.

Para CCOO, la "larga" lista de subidas "desmesuradas" en el precio de los alimentos tiene repercusiones en la mayor parte de las familias, pero en especial, en aquellas personas con rentas más bajas que, de forma obligada, deben destinar una mayor parte de sus ingresos a este tipo de productos.

El sindicato afirmó que la subida de la inflación muestra que el resultado en el control de precios en España ha sido "muy negativo", y lamentó que no se observan medidas adecuadas por parte del Gobierno para intentar mejorar la situación, "más allá de explicitar su deseo de bajada".

Para CCOO, las actuaciones en el control de precios y el impulso de las inversiones productivas son "más prioritarias" que las bajadas de impuestos, si lo que se pretende es mejorar la vida de los ciudadanos y no solo ganar unas elecciones.

"La economía española pierde fuelle en un contexto de acumulada pérdida de competitividad. La elevada inflación y la falta de inversiones en otros sectores que no fuera el inmobiliario, lastran severamente los cimientos se la economía española y ensombrecen el panorama futuro", subrayó el sindicato.

Como único elemento positivo, CCOO destacó la inflación subyacente, que desaceleró su crecimiento en dos décimas, hasta situarse en el 3,1%, un porcentaje que, según el sindicato, sigue siendo todavía "excesivamente elevado".

CCOO también insistió en la necesidad de introducir cláusulas de revisión salarial en todos los convenios como forma de garantizar el poder adquisitivo de los salarios ante la inflación, así como de establecer incrementos salariales superiores a las previsiones oficiales de inflación, ya que han demostrado "estar faltas de la más mínima credibilidad".

España se enfrenta a la desaceleración económica con una posición fiscal privilegiada, según Morgan Stanley

MADRID.- La desaceleración económica en España es ya una realidad. La economía real está haciendo frente a importantes riesgos internos, especialmente en el sector de la construcción. El paro no ha dejado de crecer en el último año –y podría acelerarse en el futuro inmediato-, la producción industrial no deja de caer, mientras que las condiciones internacionales tampoco ayudan –enfriamiento económico global, turbulencias en los mercados financieros, dificultad de acceso al crédito...-.
Sin embargo, y aunque la desaceleración es inevitable, el Gobierno tiene una posición fiscal privilegiada para mitigar los efectos del parón del ‘ladrillo’.

“España tiene un postura fiscal sólida, lo que la sitúa en una mejor posición respecto a otros países europeos, pero también respecto al pasado”, explica Morgan Stanley en su último informe sobre la economía española.
De hecho, el banco de inversión considera que las autoridades tiene demasiado margen para usar las políticas fiscales para mitigar los negativos efectos que pueden derivarse de la ralentización inmobiliaria.

Pese a este futuro económico poco alentador, la firma mantiene invariable su previsión del crecimiento del PIB en el 2,5%.
“El crecimiento de la economía durante el cuarto trimestre se situó en el 3,5%, ligeramente por encima de lo previsto, pero por debajo del 3,8% en el tercer trimestre de 2007. Además, refleja el cuarto trimestre consecutivo de desaceleración del crecimiento del PIB”, señala el informe.

Morgan Stanley cree que las desviaciones de este escenario dependerían en gran parte de la extensión de estímulos fiscales por parte del Gobierno así como de los desarrollos dentro del sector de la construcción, donde se espera un crecimiento del gasto público en infraestructuras.

El documento del banco hace especial hincapié en el debilitamiento del sector constructor.
“Creemos que la ralentización económica de España se debe en gran medida a la corrección a la baja de este sector. El crecimiento de las inversiones durante el cuarto trimestre se situó en el 2,9%, por debajo del 3,7% el trimestre anterior, y muy por debajo de la media del 5,7% para todo el conjunto de 2007”.

Bancos y cajas emitieron bonos sobre pymes por 19.800 millones en 90 días para cubrirse de la caída del ladrillo

MADRID.- Tituliza que algo queda. Eso es lo que deben pensar los bancos españoles, que lideraron un auténtico boom el pasado año en el mercado de titulización de créditos de pequeñas y medianas empresas (pymes), según www.cotizalia.com
La transformación de préstamos -sus cuotas de reembolso- en valores negociables en los mercados financieros vivió un boom en España en 2007, que le han convertido en el mayor emisor europeo por delante de Alemania, según datos de Moody's Investors, que destaca la estabilidad en el pasado reciente, aunque subraya que se ha sembrado la semilla del riesgo para 2008.

"Una recesión aguda del sector inmobiliario podría afectar seriamente a las pymes que participan en la titulización y las garantías hipotecarias", advierte la agencia de calificación de riesgo financiero. Moody's alerta de otra circunstancia supone una amenaza para estos activos: el estrecho vínculo entre las emisiones de pymes y el mercado inmobiliario. Los créditos a promotoras 'pymes' y no tan 'pymes' ha sido lo que disparado el volumen crediticio de las entidades financieras en los últimos años.

En el comienzo de 2007, España era el segundo actor con más peso en el mercado de titulización de créditos de pymes tras Alemania pero, hacia el final de 2007, el mercado español se convirtió en el mayor emisor. "Las transacciones de titulización alcanzaron en 2007 en España los 30.200 millones de euros (43.790 millones de dólares), un 71,6% más que en 2006. Dos tercios de este volumen -19.800 millones- se construyó en el cuarto trimestre del año, dijo Ludovic Thebault, socio senior de Moody's y el coautor de este informe junto a Nitesh Shah.

Según explican fuentes del sector financiero, esta avalancha registrada en el último cuarto del año se produjo ante los evidentes síntomas de desaceleración y deterioro económico motivado por la caída del ladrillo. Más vale prevenir que curar. Así, cajas y bancos mantienen aislados potenciales problemas de impago en créditos a empresas, que están menos diversificados que las hipotecas a particulares. Éstas últimas se con vierten en valores negociables a través de otro instrumento muy utilizado: las cédulas hipotecarias.

Popular y Bancaja, con problemas

La excesiva exposición al ladrillo ha provocado también que las emisiones de bonos con el respaldo de créditos a pymes comiencen a experimentar repuntes en la morosidad. Sin embargo, Moody's califica como estable al mercado. Los impagos en este tipo de instrumentos se han mantenido bajos en España, con pocos casos de morosidad dos años después de cerrar la operación. Pero excepciones a ese aparente mar en calma las ha habido. Y se hace eco de varias operaciones de titulización que han sufrido los envites de las turbulencias de crédito y de la crisis del ladrillo.

Según Moody's, tres operaciones se situaron por debajo de sus fondos de reservas, una de Banco Popular y otras dos de la valenciana Bancaja. La titulización del fondo IM Grupo Banco Popular Empresas 1, FTPYME Bancaja 4 y PYME Bancaja 5. En el caso de la valenciana Bancaja, la situación de uno de estos fondos no es nada halagüeña. Moody's pone de relieve la escalada de morosidad en el fondo FTPYME Bancaja 4.
Se trata de una titulización sobre 4.106 créditos, originados entre 1996 y 2005, que ha sufrido "una subida mayor de lo esperado en el nivel de impagos", dijo la agencia. No ha tomado decisión sobre el ráting del fondo, pero matiza que podría hacerlo conforme se vea la evolución en la estabilidad de pagos de esa titulización.

El sector financiero se enfrenta a provisiones adicionales de 120.000 millones de dólares, según UBS

ZURICH.- El sector financiero podría enfrentarse a otros 120.000 millones de dólares adicionales de pérdidas por culpa de la crisis ‘subprime’.
En una nota dirigida por UBS a sus inversores, la entidad estima que a los 150.000 millones de dólares anunciados hasta ahora en concepto de provisiones, habría que sumar otros 120.000 millones.
“Los riesgos están aumentando y las condiciones de liquidez todavía están muy lejos de la normalidad”, dice la nota.

La incertidumbre en torno al sector financiero ha provocado también cambios en las recomendaciones de UBS respecto a algunos valores.
Ahora ha incluido como “cartera defensiva” a HSBC -el mayor prestamistas de Europa-, a Bank of America –el mayor banco de EEUU por capitalización- y a UniCredit –el mayor banco de Italia por activos-.

La sombra de la quiebra inmobiliaria llega a Manhattan

NUEVA YORK.- Una de las historias más interesantes que ha recogido la prensa norteamericana a lo largo de la presente semana es la que hace referencia a la incapacidad del inversor Harry Macklowe para hacer frente al crédito de 7.000 millones de dólares obtenido el año pasado a fin de acometer la compra de siete edificios en Manhattan a Sam Zell y su Equity Office Properties Group, según se cuenta www.cotizalia.com
Una operación paralela a la adquisición, por parte de Blackstone y por otros 39.000 millones deuda incluida, del resto de la cartera del que se ha convertido en una especie de Manuel Jové norteamericano (toda la vida en el sector y venta en el pico del ciclo). El vencimiento se produjo el pasado sábado y a día de hoy siguen las negociaciones entre Deutsche Bank como principal acreedor (5.800 millones) y Fortress Investment Group (1.200) para encontrar una solución.
Una solución que pasa, ineludiblemente, por la ejecución de las garantías por parte de los acreedores, algo que no es una novedad para un Macklowe que ya viviera algo similar en la crisis de principios de los 90.

Sin embargo, lo interesante de esta fallida transacción es que pone de manifiesto la vorágine crediticia por la que, hasta hace dos días, navegaba el mercado, impasible ante los vientos huracanados que soplaban a su alrededor. La compraventa se cierra el 9 de febrero del año pasado. Ya antes, Zell había mandado a sus familiares y conocidos un video-felicitación navideña que, bajo el tronchante título de “Capitals keep falling on my head”, ponía de manifiesto la locura monetaria que, en su opinión, estaba afectando a muchos activos financieros e incidía negativamente en la rentabilidad de los mismos.
Les adjunto el documento subtitulado porque es un imprescindible para su colección. Consecuente con su filosofía liquidó en un par de meses su trust inmobiliario a un precio récord. Chapeau por él.

Por su parte, Macklowe se aprovechó de la situación del mercado de crédito para adquirir los edificios sin poner más equity o dinero de su bolsillo que los costes de estructuración. Inmuebles valorados en 7.000 millones de dólares comprados con un crédito de 7.000 millones, como financiación puente a un año. Toma ya, ríanse de Fadesa o Colonial.
Con una fortuna estimada por Forbes en 2.000 millones de dólares para él la operación era redonda. Si todo salía como pensaba, sería capaz de refinanciar los activos aprovechándose de la revalorización de los mismos transcurridos doce meses y, con el exceso, obtener liquidez para el resto de los negocios.
Si, por el contrario, la cosa se torcía su riesgo sería como mucho, el mínimo importe inicialmente desembolsado. El boom crediticio había permitido a Macklowe comprar una opción sobre un conjunto de edificios sin más riesgo que la prima abonada. Y algo más.

Y es que Macklowe otorgó como garantía a la parte senior de la deuda, -la correspondiente a DB que luego realizó varias subordinaciones, suscritas, entre otros, por General Electric-, los edificios adquiridos mientras que Fortress aceptaba como colateral el edificio de General Motors en la Quinta Avenida, adquirido por Macklowe en 2003 por 1.400 millones de dólares y que pretende vender hoy por 3.500.
Al final, si no hay otro remedio, -y ojo al dato, Colonial, que diría Butanito, el propio Macklowe acaba de volver del Golfo donde no ha encontrado socios que le acompañen en esta aventura- DB se quedaría con siete edificios recién valorados por CB Richard Ellis en 6.000 millones como contrapartida a un crédito de 5.800. Fortress vería repagada su deuda y Macklowe terminaría monetizando parte de su cartera inmobiliaria lo que se traduciría, de cumplirse el mejor escenario, en casi 2.000 millones más de patrimonio líquido. Un desenlace, sin embargo, que seguro es muy distinto al que todos habrían deseado.

Lo importante no obstante es la realidad que se esconde tras fallidos como éste. Y es que los bancos acumulan 220.000 millones de dólares de financiación apalancada que no han podido sacar de sus libros. La mitad de ella en Europa.
Tal y como recordaba recientemente Breaking Views en la edición del WSJ del pasado 12 de febrero, Deutsche la valoraba a cierre de 2007 al 96% de su valor facial mientras que el Market iTraxx LevX lo hace, a día de hoy, al 91% y el S&P´s leveraged loans al 86%.
Estos precios implicarían una pérdida, por ajustes a valor de mercado, de otros 22.000 millones para el conjunto de la banca. Pero Financial Times iba, en su Lex Column de ayer, un paso más allá y hablaba de que la caída de beneficios empresariales (algo que salvo en el caso de las financieras, de momento, es más una posibilidad que una realidad cierta) llevará a más de una compañía adquirida por el capital riesgo a la quiebra, vistos los multiplicadores pagados y los compromisos financieros adquiridos.
Cuidado. Es verdad que el caso Macklowe se encuadra mejor en lo que es el apalancamiento inmobiliario puro pero, aunque las garantías son superiores en este caso, los elevados precios pagados, el exceso de deuda y las facilidades a los prestatarios acercan, en cierto modo, esta deuda y sus riesgos al de un LBO.

No es de extrañar que almas tan poco gemelas como Botín y FG hayan reclamado, en menos de una semana, transparencia al sector financiero internacional con objeto de que el mercado sepa a que atenerse de una vez por todas. Un mensaje que, junto con la imprescindible mejora de la supervisión bancaria, especialmente en el mundo anglosajón, suscribo al 100%.
El problema, que no es manco, es que cuando las fichas del dominó siguen cayendo una detrás de otra (ayer fue el turno de los bonos municipales) cualquiera es capaz de adivinar, y sobre todo cuantificar, lo que se avecina. Hay, por tanto, que seguir extremando la cautela. Buen fin de semana a todos.

La OCDE augura que el consumo energético seguirá procediendo mayoritariamente de combustibles fósiles

PARÍS.- El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) Ángel Gurría, augura que el consumo energético continuará aumentando y que seguirá procediendo mayoritariamente de combustibles fósiles, por lo que el reto de la llamada 'economía del cambio climático' será desarrollar "todas" las alternativas viables económicamente que limiten la emisión de carbono a la atmósfera.

Los aspectos económicos del cambio climático o la llamada 'arquitectura de post-Kyoto' será el tema central de la reunión ministerial de la OCDE que tendrá lugar en París los próximos 4 y 5 de junio.

Antes, el 5 de marzo, se presentará en Oslo (Noruega) el informe sobre la perspectiva medioambiental que la Organización elabora cada cinco años.
Y a finales de abril habrá un dictamen sobre el tema que será luego debatido por los ministros de los países miembros.
El camino finalizará en Copenhague (Dinamarca) en 2009 donde la OSCE debería presentar el diseño definitivo de esta arquitectura económica.

Según explicó Gurría en un encuentro con la prensa española en la sede de la OCDE, las alternativas a los combustibles fósiles dependerán del precio que se le ponga al carbono.
"Todas las alternativas tecnológicas que se sitúen por debajo de ese precio se llevaran a cabo y habrá inversores y mercados", relató.

Para el responsable del organismo internacional habrá que poner en pie "el plan más ambicioso posible" que permita "lidiar con las consecuencias" de un aumento de la temperatura del planeta sin "consecuencias catastróficas".

Además, dio a entender que no será sostenible que haya países que no cumplan las obligaciones de reducción de emisiones del Protocolo de Kioto. "Eso ya no se puede. La arquitectura tiene que ser diferente dado el problema", resaltó.

A su juicio la clave es determinar "quien paga y por qué se paga".
Las soluciones, además, serán "todas" y no se podrá apostar sólo por una, sea vía impuestos, mercado de emisiones, energía nuclear o las tecnologías de nuevas fuentes energéticas como la eólica, solar o la biomasa.
"Todo será parte de la solución. No será viable ni posible omitir alguno de estos elementos", dijo.

Wall Street cierra plana ante la preocupación por el descenso del consumo

NUEVA YORK.- Los índices accionarios estadounidenses Dow Jones y Nasdaq cayeron este viernes por temores sobre el gasto del consumidor después de que el minorista tecnológico Best Buy advirtiese que el tráfico de clientes disminuyó tras las festividades de fin de año.
El mercado también se sacudió tras conocer que el índice de confianza del consumidor cayó a su mínimo nivel en 16 años.

Las operaciones ligadas al vencimiento de opciones de acciones provocaron un recorte de las pérdidas, dijeron analistas, y el índice S&P 500 cerró con una leve alza.

Según el último dato disponible, el promedio industrial Dow Jones perdió un 0,23 por ciento a 12.348,21 unidades. El índice Standard & Poor's 500 subió un 0,08 por ciento a 1.349,98.

El índice compuesto Nasdaq cayó un 0,46 por ciento a 2.321,80 unidades

El dólar se estabiliza en Asia tras las declaraciones de la Fed

TOKIO.- El dólar se estabilizaba en Asia tras una pronunciada caída el día anterior por la promesa del presidente de la Reserva Federal de que la entidad actuará de la forma necesaria para apoyar el crecimiento económico.
Las palabras de Ben Bernanke reforzaron las expectativas de que la Fed volverá a reducir ampliamente sus tipos de interés el mes próximo.

La moneda estadounidense apenas registraba cambios después de alejarse de los máximos de un mes respecto al yen.

El dólar también acusó el recorte de los ratings por parte de Moody's del brazo asegurador de bonos de FGIC, convirtiendo a la empresa en la primera aseguradora de deuda que pierde su mejor calificación de las tres principales agencias.

"El dólar probablemente siga débil en general pero hará falta tiempo para que rompa por debajo de 105 yenes hacia 101 yenes", expresó Masaki Fukui, economista de mercado senior de Mizuho Corporate Bank.

"El mercado podría permanecer en compás de espera hasta que surjan factores adicionales", agregó.

El déficit por cuenta corriente sube en noviembre

MADRID.- La balanza de pagos aumentó su déficit en noviembre hasta 11.637 millones de euros frente a un saldo negativo de 10.268 millones de euros en noviembre de 2006, dijo hoy viernes el Banco de España.
En términos acumulados, el déficit por cuenta corriente subió en los primeros 11 meses del año un 19 por ciento interanual a casi 97.000 millones de euros.

Este incremento se debe en primer lugar al aumento del déficit de la balanza de rentas, y, en menor medida, al incremento de los saldos negativos de la balanza comercial y de la balanza de transferencias corrientes, dijo el Banco de España.

Por su parte, el déficit acumulado de la balanza comercial se situó hasta noviembre en 79.190 millones de euros frente a 74.513 millones del mismo período del año anterior, mientras el saldo negativo de la balanza de rentas aumentó a 29.763 millones de euros desde 20.877 millones en los primeros 11 meses de 2006.

La Eurozona logra excedente del comercio exterior pese al euro fuerte

BRUSELAS.- La Eurozona obtuvo un excedente comercial de 28.300 millones de euros (unos 41.600 millones de dólares) en 2007, tras un déficit de 9.300 millones (13.650 M USD) en 2006, según cifras publicadas este viernes por Eurostat.
Esta mejora de la balanza comercial fue lograda a pesar del alza del euro, que se apreció un 10% durante 2007. La divisa europea había alcanzado un récord de 1,497 dólares en noviembre pasado.

En el mes de diciembre, la zona euro registró en cambio un déficit de 4.200 millones de euros en su comercio exterior, tras un excedente de 3.000 millones en noviembre.

En el conjunto de la Unión Europea, el déficit comercial siguió siendo muy elevado en 2007, aunque se redujo un poco con respecto a 2006, con 185.700 millones de euros contra 192.100 millones en 2006.

Almunia dice que Europa no necesita estímulos fiscales como EEUU

BRUSELAS.- La zona euro no necesita estímulos fiscales similares a los introducidos en EEUU, dijo el Comisario Europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia.
"Tenemos condiciones diferentes, así que no necesitamos copiar la decisión adoptada por el Congreso estadounidense", expresó ante periodistas.

"Veo como principal riesgo para las perspectivas de crecimiento la continuación de la turbulencia en los mercados financieros y, al mismo tiempo, la posibilidad de una desaceleración estadounidense más pronunciada", dijo.

España tiene margen para afrontar la desaceleración, según Solbes

MADRID.- La economía española goza de unos buenos fundamentos para afrontar una desaceleración económica que tiene sus raíces básicamente en la crisis de liquidez a escala mundial, dijo hoy el ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes.
Solbes se refirió al superávit público - que en 2007 habría superado el 2 por ciento del PIB - y que permite cubrir "sin problemas" el impacto de un menor crecimiento en el gasto social.

"El país está preparado para una fase de menor crecimiento", dijo Solbes al término del Consejo de Ministros.

No obstante, el titular de Economía dijo compartir la preocupación con las familias que ven un deterioro de su solvencia económica.

Solbes indicó que el Gobierno estaba tomando medidas desde que llegó a La Moncloa en 2004 para abordar previsibles cambios del ciclo económico, lo que hace innecesario la adopción de cualquier plan de choque que sería contraproducente.

"Los planes de choque son alivios momentáneos que introducen distorsiones económicas y presiones inflacionistas a medio plazo", dijo Solbes.

En este sentido, Solbes, quien también es vicepresidente Segundo del Gobierno, indicó que era necesario continuar con la estabilidad presupuestaria y aplicar sólo un conjunto de medidas microeconómicas muy acotadas, algunas de ellas ya en marcha.

También hizo mención a los planes de gasto del Gobierno en las políticas productivas.

"No vamos a perder ni un minuto en seguir desarrollando la inversión en I+D+i", dijo.
Con referencia a la política monetaria, Solbes indicó que su aplicación corresponde al Banco Central Europeo (BCE), que está desarrollando su labor adecuadamente.

"En general, el BCE ha tenido una política monetaria adecuada y el acceso a la liquidez se ha resuelto de una manera muy eficiente", expresó Solbes.

En cuanto a la situación de desaceleración del sector de la construcción, Solbes se refirió al impulso que el Gobierno va a dar a la vivienda de protección oficial con una construcción prevista este año de 100.000 nuevas viviendas.

También habló de los avales de 3.000 millones de euros del ICO para facilitar la financiación de la adquisición de vivienda de protección oficial.

Además, señaló que el Gobierno aprobó en su reunión de hoy una modificación del Reglamento de las instituciones de inversión colectiva (ICC) que flexibiliza los límites de endeudamiento de estas instituciones dedicadas a la vivienda protegida en alquiler y fomenta la liquidez de la inversión en estas instituciones.

Las Bolsas europeas caen un 2% presionadas por los bancos y temor al crecimiento

LONDRES.- Las bolsas europeas cerraron hoy viernes con un fuerte descenso, reflejando así la creciente preocupación de los inversores sobre la economía estadounidense y la posibilidad de que los grandes bancos anuncien más provisiones como consecuencia de la crisis crediticia.
El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 cerró con un retroceso de un 1,96 por ciento a 1.309,34 unidades.

El sector bancario registró las mayores caídas y los inversores buscaron refugio en los títulos de las farmacéuticas y compañías alimenticias, considerados como sectores menos expuestos a los ciclos económicos.

El banco francés Natixis fue el peor valor del mercado europeo y se hundió un 11 por ciento después de revelar unas provisiones por valor de 1.000 millones de euros asociadas a la crisis crediticia.

UBS, que cedió en la sesión un 3,8 por ciento, acumula un descenso semanal de un 12 por ciento, después de que Citigroup dijera en una nota que esperaba que el banco suizo revelara más provisiones.

Wall Street también caía arrastrado por el desplome del índice preliminar de confianza del consumidor estadounidense, los datos manufactureros del Estado de Nueva York -que alcanzaron su nivel más bajo desde abril de 2003- y el anuncio de un 'profit warning' por parte del minorista electrónico Best Buy.

HSBC, BNP Paribas, Société Générale, Barclays y Standard Chartered perdieron entre un 2,3 y un 4,1 por ciento.

Contrarrestando la tendencia bajista del sector, Deutsche Postbank se apreció un 2,8 por ciento gracias a los rumores de opa.

La farmacéutica GlaxoSmithKline se anotó un alza del uno por ciento en después de que el holding del multimillonario Warren Buffett, Berkshire Hathaway, comprara una pequeña participación en la compañía.

El grupo de alimentación Cadbury se apreció un 1,9 por ciento, mientras que en Alemania, el grupo Fresenius Medical Care avanzó un 2,5 por ciento.

También el fabricante de motores Safran escaló un 6,2 por ciento hasta convertirse en la compañía que se anotó las mayores subidas porcentuales, mientras que la minera Vedanta subió un 3,4 por ciento, gracias a mejoras de recomendación por parte de brokers.

Trichet llama en Madrid a la moderación salarial en Europa

MADRID.- El presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, hizo una nueva advertencia este viernes sobre la necesidad de moderación salarial en Europa al tiempo que animó a los estados a realizar reformas estructurales.
"Hay una necesidad en toda Europa para reducir las rigideces del mercado laboral", dijo Trichet en una conferencia en Madrid en la que añadió que, particularmente en países con tasas de desempleo elevadas, "es importante que los incrementos salariales no consuman las ganancias de productividad".
Trichet, aseguró que el BCE hará "lo que sea necesario para controlar las expectativas de inflación", ya que, su principal deber es velar por la estabilidad de precios, y reiteró que en la última reunión del Consejo "no se habló ni de subir ni de bajar los tipos".

En declaraciones realizadas durante su asistencia al 'Foro ABC', Trichet subrayó que en estos momentos la Eurozona tiene un IPC "especialmente elevado", debido a la escalada global de los precios del petróleo y los alimentos.
"Nuestro deber es diseñar una postura de política monetaria que permita conseguir estabilidad de precios a medio plazo después de este repunte inflacionista, que luego desaparecerá", aseguró.

Trichet ejerció una férrea defensa del control de la inflación como objetivo prioritario del BCE, y aseguró que ésta debe seguir siendo la consigna de la institución para velar por el crecimiento económico de la zona euro.

En su opinión, sería una "locura" abandonar este criterio y se preguntó qué tipo de interés de referencia asignarían los bancos en caso de no tener en cuenta la inflación, lo que incrementaría las primas de riesgo y acabaría por encarecer aún más las hipotecas.
"Estamos haciendo lo que tenemos que hacer", aseguró el banquero.

"Debo decir que el conseguir estabilidad de precios es muy importante y también el tener en cuenta las expectativas de inflación, que es esencial. Este es el razonamiento que siguieron todas nuestras democracias.
Según este razonamiento, todas estas democracias nos piden tener estabilidad de precios, esto es lo principal y un requisito necesario para el crecimiento sostenible", concluyó Trichet.

Concretamente, Trichet afirmó que es necesario evitar efectos de segunda ronda de la inflación, para lo que es imprescindible la moderación salarial.
"Es importante que los incrementos salariales no absorban los beneficios de la productividad para poder mantener los incentivos y que las empresas creen más puestos de trabajo", señaló

El presidente del BCE habló también de las necesidades de reformas estructurales en la economía comunitaria para fomentar la flexibilidad laboral y recortar el paro, y puso como ejemplo a países como Irlanda y Dinamarca, donde la tasa de paro se encuentra significativamente por debajo de la media de la zona euro y la tasa de ocupación muy por encima de la eurozona.

Además, se mostró convencido en la necesidad de "reducir la rigidez laboral" en Europa, lo que repercutiría favorablemente en empleo y crecimiento.

Con respecto a las turbulencias financieras, Trichet reiteró el mensaje de incertidumbre al respecto y no quiso cuantificar el impacto del 'subprime' en cifras al ser un proceso "que continua en curso y no está cerrado".
"Hay que ser prudente y responsable a la hora de hablar de esto", aseveró.

Lo que sí aseguró es que son necesarios cambios en los criterios y funcionamiento de las agencias de ráting y calificación. "Las agencias de calificación deberían funcionar mejor", aseguró Trichet, que calificó el asunto como "uno de los puntos esenciales" para el que hay que "tomar medidas adecuadas".

Preguntado sobre las previsiones de crecimiento en la Eurozona, el presidente del BCE señaló que se harán públicas el mes que viene, y adelantó que, según los indicadores del sector privado y las cifras barajadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), los datos no suponen recortes tan drásticos como los barajados por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Concretamente, Trichet habló de un crecimiento de entre el 1,8% y el 1,9%, aunque descartó que estas previsiones sean las del BCE, sino que las atribuyó a la OCDE y al sector privado.

El Ibex cae un 1,8% por temor a una recesión en EEUU

MADRID.- El Ibex-35 cerró hoy con una fuerte caída arrastrado por los dos grandes bancos y Telefónica entre renovados temores a que la economía de Estados Unidos entre en recesión tras una serie de débiles indicadores.
En el mercado doméstico, BBVA retrocedió un 2,39 por ciento a 13,48 euros, mientras que Santander bajó un 2,35 por ciento.

Dentro del sector, Bankinter cayó un 3,95 por ciento y Popular bajó un 3,1 por ciento.
Además, Telefónica se depreció un 2,18 por ciento.

El Ibex-35 retrocedió un 1,8 por ciento a 13.073,9 puntos. En la semana, el índice selectivo se ha depreciado un 1,075 por ciento.

En tanto, el índice general de la Bolsa de Madrid cedió hoy un 1,71 por ciento a 1.417,62 unidades.
En el selectivo, las mayores ganancias se las anotaron los títulos de Colonial con un avance del 8,14 por ciento a 1,86 euros entre expectativas de una posible opa por parte del fondo de inversión de Dubai.

Según fuentes próximas a la negociación, el fondo podría tomar una decisión la próxima semana tras evaluar las cuentas del grupo inmobiliario español.

Entre los pocos valores que acabaron con ganancias figuraron los títulos de Endesa, con alzas del 2,29 por ciento, y Criteria, con subidas del 0,89 por ciento.

A pesar de que no se sustrajo a las pérdidas, Unión Fenosa suavizó las caídas hasta un 0,83 por ciento tras conocerse que la eléctrica ha vendido un 2,5 por ciento en France Telecom España a Crédit Suisse International por 197,34 millones de euros

La eléctrica agregó que la venta le aportará unas plusvalías brutas de aproximadamente 135 millones de euros en 2008.

Al margen del Ibex-35, Solaria fue el peor valor de la bolsa española con un descenso del 15,94 por ciento a 13,55 euros a pesar de haber desmentido la existencia de supuestas anomalías contables en sus resultados de 2007.

Los precios suben en enero a máximos de 12 años

MADRID.- Los precios volvieron a subir en enero en España hasta niveles desconocidos desde hace algo más de 12 años, empujados por la energía y los alimentos, pero la inflación subyacente - la más estable - bajó dos décimas por una reducción en los servicios.


El Instituto Nacional de Estadística (INE) dijo hoy que los precios subieron en enero hasta una tasa interanual del 4,3 por ciento - máximo nivel desde noviembre de 1995 - y que bajaron seis décimas en comparativa mensual.

Sin embargo, la inflación subyacente - la que elimina los componentes más volátiles de los precios - bajó dos décimas en enero hasta una tasa interanual del 3,1 por ciento, la más baja desde octubre de 2007.

El Gobierno dijo que la reducción de la subyacente indicaba que no se estaban produciendo efectos de segunda ronda, un aspecto particularmente vigilado por el Banco Central Europeo.

Además, según el Ministerio de Economía y Hacienda, el incremento de los precios tiene un carácter exógeno debido a "notables" aumentos en los precios internacionales de materias primas como el petróleo y los cereales.

El secretario de Estado de Economía, David Vegara, indicó que la inflación comenzará a bajar a partir de febrero para, con un descenso gradual durante el resto de ejercicio, cerrar el año por debajo del 3%.

"Yo creo que con la información disponible deberíamos ver a partir de ahora un descenso de inflación, particularmente acusado a partir de la primavera, para cerrar claramente por debajo del tres por ciento a finales de este año", dijo Vegara.

Por otra parte, la inflación armonizada con la Unión Europea subió hasta el 4,4% interanual, el nivel más alto desde que se creara esta serie en enero de 1997.

Los analistas estaban de acuerdo en que si el precio internacional del petróleo no experimenta una subida adicional en los próximos meses y el precio de los alimentos se estabiliza, la inflación comenzará a bajar gracias a un efecto base interanual favorable y a la reducción del consumo de los hogares.

Mientras, el galopante déficit corriente de España se encaminaba al 10 por ciento de su Producto Interior Bruto después de que en noviembre escalara 11.637 millones de euros hasta totalizar 97.000 millones de euros en los once primeros meses del año.

El Banco de España dijo que el aumento era debido al déficit de la balanza de rentas, y, en menor medida, al incremento de los saldos negativos de la balanza comercial y de la balanza de transferencias corrientes.

El déficit acumulado de la balanza comercial se situó hasta noviembre en 79.190 millones de euros frente a 74.513 millones del mismo período del año anterior, mientras el saldo negativo de la balanza de rentas aumentó a 29.763 millones de euros desde 20.877 millones en los primeros 11 meses de 2006.

La sucesión de indicadores económicos divulgados desde primeros de año han apuntado continuadamente a una desaceleración de la economía española en mayor intensidad que las prevista.

Los "fondepósitos" se abren paso en nuestro mercado financiero

MADRID.- En los últimos meses son varias las firmas españolas que han introducido la fórmula del fondepósito en su nueva oferta. ¿El objetivo? Conseguir que aquellos inversores que ahora huyen de los fondos de Bolsa, huyan también de la industria de fondos en general.

Los fondepósitos surgieron al amparo de la Ley de Instituciones de Inversión Coletiva que permite a los fondos colocar su dinero en depósitos a la vista o con un vencimiento no superior a 12 meses, de entidades de países de la UE o de otros países si su ponderación no supera el 20%.

Ahorro Corporación (AC) fue la primera entidad en utilizar esta nueva fórmula para captar inversores. Lo hizo en plena primera guerra del pasivo con su fondo ‘AC Fondepósito’. Luego llegaron los productos de aquellas cajas con las que AC tiene acuerdos de gestión.
Es el caso de Caja Murcia (Caja Murcia Fondepósito Plus) o Caja Castilla La Mancha y Caja Rural.

Una luna de Saturno tiene más hidrocarburo que toda la Tierra

HOUSTON.- La luna Titán, de Saturno, tiene reservas de hidrocarburos superiores a todas las de petróleo y gas natural conocidas en la Tierra, según observaciones realizadas por la sonda Cassini, reveló el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
Según científicos del Laboratorio de Físicas Aplicadas de la Universidad "Johns Hopkins", esos hidrocarburos caen desde el cielo y forman grandes depósitos en forma de lagos y dunas.
“Titán esta cubierta por material que contiene carbono. Es una gigantesca fábrica de materiales orgánicos”, manifestó Ralph Lorenz, miembro del equipo científico que controla las operaciones del radar de Cassini en el laboratorio.
“Estos enormes yacimientos de carbono son una importante ventana hacia la geología y la historia meteorológica de Titán”, agregó.

La temperatura media en la luna Titán es de 179 grados centígrados bajo cero y en vez de agua, su superficie está cubierta por hidrocarburos en la forma de metano y etano.